"A Jehová clamé estando en angustia,
Y él me respondió. Libra mi alma, oh Jehová, del labio mentiroso,
Y de la lengua fraudulenta. ¿Qué te dará, o qué te aprovechará,
Oh lengua engañosa? Agudas saetas de valiente,
Con brasas de enebro. ¡Ay de mí, que moro en Mesec,
Y habito entre las tiendas de Cedar! Mucho tiempo ha morado mi alma
Con los que aborrecen la paz. Yo soy pacífico;
Mas ellos, así que hablo, me hacen guerra."
Salmos 120:1-7
No hay comentarios:
Publicar un comentario